El sueno de la razón…

- que ha pasado?!

- que…?, pregunto, medio- dormida

- _ta, estabas gritando

- si…

- pero que te ha pasado, porque estabas gritando?

- aaah…

- _ta, que te pasa?

- es que no soy yo

- de que estas hablando?!

- es que me he despertado en cuerpo de otra persona, no soy yo. Me he despertado como el personaje de una novela.

- pues quien eres?

- soy narrador

- de que me estas hablando?

- yo nos estaba mirando, desde arriba. Veía a esta rubia dormir en la cama y te veía a ti trabajar con ordenador. Yo era el narrador, era la cámara. Y de repente me he despertado como el personaje, me he despertado y soy esta chica de la cama.

- _ta, es que tu ERES esta chica.

- no, no soy yo, yo soy solo narrador de esta historia.

Un baile

- Eso era un baile. Estaba contigo. Veía que en la sala estaban todos mis amigos o mejor dicho, la gente que conocía. Tu me dijiste que tenias que salir pero ahora volvías y yo te quería esperar. Me di vuelta para pedir algo de tomar y cuando me gire de nuevo la sala estaba vacía. No había nadie excepto a mis ex liándose con otras chicas, pero a mi no me importaba porque te esperaba a ti. Por eso no quería despertarme, porque te esperaba a ti.

Una clase de español.

La esta dirigiendo mi profesora favorita. Sin embargo esa vez la clase parece ser un poco diferente. Los estudiantes no están divididos en pequeños grupos, estamos todos, unas 200 personas en la misma sala haciendo la misma clase.

Silencio.

La profesora empieza a hablar por el micrófono:

- puesto que la señorita TA acaba de volver de España, ha vivido ahí casi dos anos, la vamos a pedir que nos cuente un poco su vida. En español por supuesto. Que decís?

Los estudiantes hicieron coro. Me levanto, un poco asustada, pero es nada, si es verdad que viví tanto tiempo en España, tanto tiempo llevo estudiando español… me saldrá bien. Me acerco al micrófono y empiezo a hablar:

- me llamo…yy…..eee….vivi……yyyyy….ee…

Soy incapaz de decir ni una frase bien. Sigo al lado de profe porque incluso soy incapaz de moverme y sentarme en mi asiento. Miro al público.

La profesora, desilusionada arranca el micrófono de mis manos y en sala se puede oir perfectamente la risa de mis colegas.